Desde un ordenador encontrado en un contenedor, Omar Montes grabó su primer tema. Sin formación musical, C. Tangana se convirtió en artista multiplatino. Y Lola Índigo, la primera expulsada de Operación Triunfo 2017, es hoy estrella multiplatino.
Tres historias de éxito que desafían lo establecido.
¿Qué tienen en común?
Que salieron adelante a pesar de las dudas, de los miedos, de los pensamientos limitantes, que se esforzaron y fueron constantes, que trabajaron más que nadie.
Todos sentimos miedo al emprender, hay un miedo que nos acompaña y otro que nos paraliza (se manifiesta en forma de procrastinación o autosabotaje).
Es fundamental permitir que el miedo se exprese: dejar que se escapen algunas lágrimas, atreverse a decir «me siento…» o «me da miedo…», y así darle voz y espacio a esa emoción.
Concédele a tus miedos paralizantes sus 15 minutos de gloria.
A menudo, el simple hecho de compartirlo con una de esas personas vitamina (término acuñado por la psiquiatra Marian Rojas) que sabes que te apoyará pase lo que pase, es todo lo que necesitas.
Y entonces, ese miedo paralizante se evapora; se queda el miedo que no paraliza, pero bueno, ese al menos te deja trabajar.
Tu persona vitamina te recuerda por qué haces lo que haces y para quién, y entonces vuelves a tu centro y las ideas brotan como si de lluvia se tratase.
Sin darte cuenta, subiste otro peldaño significativo en tu escalera de aprendizaje.
Donde tarde o temprano aparecerá otro miedo «New level, new devil», no creas que te vas a librar…jeje
Pero bueno, eso ya lo solucionarás cuando llegue el momento…
Por ahora, vamos a disfrutar del nuevo peldaño subido🌄
¿Miedos a la hora de emprender? ¿Qué tal si los expresas y así puedes pasar página?
Si estás pensando en emprender o estás emprendiendo y los miedos te acechan escríbeme por privado, soy una persona vitamina.
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